PATO Capitulo 12
Capítulo 12 La última página El ruido de la ciudad era una sinfonía lejana desde el pequeño apartamento en el norte donde Hernán había decidido establecerse. Era un lugar modesto, rodeado de montañas y calles tranquilas, muy lejos del bullicio y la oscuridad que habían dominado su vida en los últimos meses. La paz de ese entorno lo ayudó a encontrar un nuevo ritmo, uno que necesitaba urgentemente tras los eventos que lo habían marcado de por vida. A su lado, en el escritorio, había un cuaderno abierto y un bolígrafo. Las palabras fluían a medida que escribía, como si finalmente pudiera ordenar sus pensamientos y procesar la marea de emociones que lo había abrumado. Escribir era su forma de rendir homenaje a Patricia y de darle sentido a todo lo que había vivido. “La amistad, cuando es verdadera, es un ancla que ni el tiempo ni el dolor pueden romper” —escribió, recordando su relación con Patricia. Durante años había sido su confidente, su apoyo incondicional. A pesar de que nunca fu